Es indispensable que los países inicien la transición inmediata a regímenes que contengan el medicamento dolutegravir.
Redacción Gestarsalud
La Organización Mundial de la Salud (OMS) dio a conocer su más reciente informe sobre la farmacorresistencia del VIH 2021, en el que no sólo se puede encontrar un panorama detallado de cómo está aumentando la farmacorresistencia en los países con tasas más altas de infección por VIH, sino también las medidas que están adoptando estos países para garantizar que las personas reciban medicamentos eficaces para tratar y prevenir el VIH.
El informe revela que en el año 2020 el 64 por ciento de los países con las tasas más elevadas de infección por VIH tenían planes nacionales de acción para prevenir, vigilar y responder a la farmacorresistencia del VIH, planes basados precisamente en el Plan de Acción Mundial sobre la Farmacorresistencia del VIH (2017-2021). Sin embargo, la OMS explica que es esencial que los países desplacen sus tratamientos convencionales a unos más potentes.
El organismo explica que cuando la resistencia del VIH a los medicamentos inhibidores INNRT (no nucleosídicos de la retrotranscriptasa), que son los que tienen como objetivo inhibir la actividad del virus (como la nevirapina y el efavirenz) alcancen antes del tratamiento un umbral del 10 por ciento en los estudios realizados se debe cambiar urgentemente el tratamiento de primera línea contra esta enfermedad por un régimen más potente que incluya el dolutegravir.
Y en este momento, según la OMS, cada vez son más los países que alcanzan el umbral del 10 por ciento de resistencia del VIH a los INNRT antes del tratamiento, además de que la evidencia demuestra que las personas que han estado expuestas a medicamentos antirretrovíricos tienen tres veces más probabilidades de presentar resistencia a los INNRT.
Colombia, según el documento, la prevalencia general de la farmacorresistencia se ubicó en 6,3 por ciento y en la región Brasil mostró un 6,8 por ciento, México 26,2 por ciento, Paraguay 12,8 por ciento, Argentina 12,3 por ciento y Cuba 22,8 por ciento.
A propósito de lo anterior, la OMS hizo un llamado enfático a todos los países para que efectúen un seguimiento estricto de la resistencia, en particular en aquellos pacientes que empiezan a tomar medicamentos antirretrovíricos.
(Le puede interesar: ¿Cuáles vacunas contra la COVID-19 se recomiendan para pacientes inmunodeprimidos?)
¿Cuáles son los pasos a seguir?
Los resultados confirman la necesidad inmediata de acelerar la transición a regímenes médicos contra el VIH que contengan el dolutegravir, que es un medicamento diseñado para disminuir la cantidad de VIH en la sangre y aumentar la cantidad de células inmunológicas que ayudan a combatir las infecciones en el cuerpo, sobre todo en los países que siguen utilizando tratamientos antirretrovíricos basados en los INNRT.
Es importante resaltar que la OMS recomienda desde 2019 el uso de dolutegravir como tratamiento preferido de primera y segunda línea para todos los grupos de población, no sólo porque es más eficaz, sino más fácil de administrar, además de tener menos efectos secundarios que otros medicamentos actualmente en uso.
Además, el dolutegravir es un medicamento que cuenta con una barrera genética alta a la farmacorresistencia, lo que por obvias razones refuerza su durabilidad y eficacia a largo plazo.
Meg Doherty, directora de los programas mundiales de VIH, hepatitis e ITS de la OMS, dijo: “La publicación de este informe y las actividades de vigilancia, que ahora se llevan a cabo de forma periódica, obliga a los países a rendir cuentas: a proporcionar un tratamiento y una atención de alta calidad a las personas infectadas por el VIH y a invertir en la resistencia a los antimicrobianos”.
“En el futuro ampliaremos nuestra vigilancia a los nuevos medicamentos antirretrovíricos y a los que se administran como agentes de acción prolongada a efectos de prevención y tratamiento, de modo que podamos mantenerlos a lo largo de toda la vida de las personas infectadas por el VIH”, explicó.
(Le recomendamos: En Colombia solo el 72% de las personas con VIH conocen su estado serológico)