Un exitoso procedimiento ocular recuperó la visión y calidad de vida de una adulta mayor

Esta es la historia de Edelmira Fino, quien había sido diagnosticada con catarata.

Redacción Gestarsalud

El equipo especializado en oftalmología y optometría del Hospital Jorge Eliécer Gaitán, de la Subred Centro Oriente de Bogotá, logró devolverle la visión y la calidad de vida a Edelmira Fino, una adulta mayor de 62 años, afiliada a la EPS Capital Salud, que tenía limitación en su visión por una condición llamada cataratas.

Las cataratas suelen ser una patología muy común en los adultos mayores, sin embargo la mayoría de ellos no la evidencian a tiempo por falta de control médico, de allí la importancia de asistir a chequeos médicos mensuales.

En el Hospital Jorge Eliecer Gaitán se realizan alrededor de 150 cirugías de cataratas mensualmente.

Según explican expertos del hospital, la catarata es una opacidad del cristalino del ojo o lente, como se conoce normalmente, que se encuentra detrás del iris y la pupila. Esta es la causa más común de pérdida de visión en personas mayores de 40 años y la causa principal de ceguera en el mundo.

La historia de Edelmira Fino, es la historia de muchos

La señora Edelmira Fino, adulta mayor afiliada a la EPS Capital Salud, desde hace dos años había comenzado a experimentar limitaciones en su visión, razón que la motivó a consultar con el médico ya que pensaba que podía deberse a que la fórmula de sus lentes necesitaba una modificación. Sin embargo lo que ella creía era algo simple resultó ser una enfermedad llamada cataratas.

La falta de visión de doña Edelmira aumentó de manera precipitada en poco tiempo, tanto que en menos de dos años dejó de hacer actividades que normalmente realizaba a diario, como por ejemplo atender su negocio.

“Saqué cita en el Hospital Jorge Eliécer para que me dieran otra fórmula de mis lentes. El médico me preguntó que si sabía lo que tenía, yo le dije que estaba viendo muy poco y él me explicó que las cataratas me estaban tapando todo el ojo y esto era lo que me impedía ver”, relata Edelmira Fino.

Doña Edelmira fue diagnosticada con cataratas por el médico oftalmólogo Rodrigo Luis Vivas, de la Subred Centro Oriente, quien le explicó que “la opacidad del cristalino se estaba viendo afectada, lo que se puede asemejar muy bien a un vidrio empañado al que no le entra de luz, por tanto, se disminuye la visión”, señaló.

Precisamente esto era lo que estaba experimentando doña Edelmira,. «Ya no veía nada, tengo las manos quemadas porque cuando servía el tinto, se me regaba sin darme cuenta. Muchas veces me pagaban los clientes y yo devolvía vueltas de más o a veces menos”, manifestó la señora Edelmira.

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Recuerda que era tal su afectación que ni siquiera podía movilizarse, ya que según ella, se estrellaba contra los muros, escalones o no veía los carros a la hora de cruzar una calle. 

El médico Vivas explicó que el estado de salud visual de doña Edelmira era crítico. «Esto le impedía movilizarse sola, tanto en la calle, como en su casa, firmar documentos, tomar el bus, entre otras actividades”, afirmó.

Doña Edelmira relata que en un comienzo sus hijos estaban muy preocupados por su estado, y que por ello empezaron a ahorrar para poder costear los gastos de la cirugía, sin embargo gracias a un amigo de la familia se enteraron que en el Hospital Jorge Eliécer la podían operar sin costo.

“Nosotros somos desplazados y a través de la EPS comencé el proceso para que me operaran y así fue, pues me estaban cobrando más de seis millones de pesos por resolver mi problemática, mientras que, en este hospital no pagué nada por la cirugía”, indicó. 

Esta adulta mayor es enfática en decir que su vida cambió con la operación. “Yo estoy muy agradecida con los médicos, ahora puedo ver bien. Ya puedo dar vueltas, puedo salir. Veo por mis dos ojos, me puedo defender y entre más días pasan después de la cirugía, veo mejor”, expresó con una sonrisa en el rostro.

Finalmente los hijos de doña Edelmira expresaron que los deja muy tranquilos el hecho que doña Edelmira pudiera ser operada y recuperara su visión, además expresan que fue de gran ayuda que el hospital no cobrara absolutamente nada por su cirugía.

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