2020 fue un año de desafíos económicos y, sobre todo, emocionales. De manera global la salud mental de la humanidad ha estado en jaque; amenazada- entre tantas cosas- por una nueva enfermedad, que este año no parece dar tregua, a pesar de todos los esfuerzos científicos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que muy pocas personas en el mundo tienen acceso a servicios de salud mental de calidad. En los países de ingresos bajos y medianos, más del 75 % de las personas con problemas de salud mental no reciben ningún tratamiento y, en general, los gobiernos gastan en promedio menos del 2 % de sus presupuestos de salud en esta cobertura. La organización rechaza la situación.
De la mano con la COVID-19 y otras enfermedades, que también resultan mortales y amenazantes, la salud mental comienza a ser un problema de salud pública dominante y preocupante. Ayer, el ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruíz Gómez, informaba a la ciudadanía que, según datos aportados por la OMS, el 13 % de la carga de morbilidad mundial está relacionada con enfermedades mentales. A este ritmo, para el año 2030 la OMS estima que los problemas de salud mental sean la primera causa de discapacidad en el mundo. Un panorama preocupante.
«La salud mental se presenta como uno de los grandes retos en este tiempo de pandemia. El desgaste físico y mental de las personas y los desenlaces fatales son temas que hoy juegan un papel fundamental en los sistemas de salud» dijo Hernando Santamaría, médico psiquiatra, profesor de la Pontificia Universidad Javeriana y doctor en neurociencias. El experto invitó a prestar especial atención a personas (familiares o amigos) que cambian su comportamiento y tratan de estar aislados, que desmejoran sus hábitos alimenticios y que son conocidos como personas que padecen síntomas menores de salud mental».
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Santamaría hizo un llamado a la ciudadanía con el fin de encender las alarmas en estos casos especiales, brindando una escucha activa y consultando a los profesionales de la salud para ayudar a quien lo necesita.
Proyectos de Ley para atender la salud mental
Dos importantes proyectos de ley en materia de salud mental fueron aprobados esta semana en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes. El primero, el 162 de 2020, es autoría de la bancada del Centro Democrático y varios congresistas del partido del Gobierno Nacional. Los congresistas apoyaron el proyecto de ley, por medio del cual se adiciona un parágrafo al artículo 27 de la Ley 1616 de 2013 y se dictan otras disposiciones en el ámbito de promoción de la salud mental y prevención del trastorno mental. En esencia, la normativa le da al Ministerio de Salud y Protección Social la responsabilidad de visitar las entidades prestadoras de servicios asociados a la salud mental y establece estrategias para mejorar el tema de salud mental en instituciones educativas, especialmente. Esta iniciativa avanza a segundo debate, es decir, a la plenaria de Cámara de Representantes.
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Esta misma célula aprobó el Proyecto de Ley 397 de 2020, por medio del cual se crea una Dirección de Salud Mental como parte del Ministerio de Salud y Protección Social. La autoría de esta propuesta es del representante Jorge Gómez Gallego, del partido Polo Democrático, junto con las representantes Norma Hurtado Sánchez y Angela Patricia Sánchez Leal. La Comisión aprobó el proyecto de ley, que pasa ahora a segundo debate en plenaria de la Cámara de Representantes.
Esfuerzos gubernamentales
En palabras del ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruíz Gómez, en Colombia se ha hecho un gran esfuerzo para preservar la salud mental de la ciudadanía, sobre todo en el contexto de la pandemia actual. Algunos de los esfuerzos destacados por el ministro tienen que ver con la formación de más de 5.000 profesionales en primeros auxilios psicológicos, cuya labor contó con el apoyo de la Universidad El Bosque. Durante el año 2020, en plena cuarentena nacional, se habilitaron 735 servicios de salud mental y de farmacodependencia. La línea telefónica 192, opción 4, logró hacer 8.000 consultas para dar soporte inmediato a las personas que lo necesitaban. En Colombia se llevó a cabo el estudio sobre la relación entre los riesgos de salud mental y el nivel de resiliencia de la población colombiana. Para ello más de 15.000 colombianos, mayores de edad, fueron encuestados. Algunos de los datos más importantes son los siguientes:
- 30 % de la población encuestada presentaba algún riesgo de salud mental, relacionados con síntomas de ansiedad y depresión.
- 6.3 % de los problemas manifestados estaban relacionados con posibles conductas suicidas.
- 13 % de los encuestados manifestó algún riesgo asociado al consumo de sustancias psicoactivas.
«Son datos importantes que nos invitan a la reflexión y a seguir trabajando en el control de la salud mental», aseguró el ministro Ruíz.
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Algunas recomendaciones dadas por el líder de la cartera de salud, en aras de evitar trastornos emocionales, están orientadas en las siguientes prácticas:
- Tomar control de la información que se consume.
- Identificar cuáles son las fuentes de información a las que se puede acudir para buscar ayuda.
- Atender los sentimientos y emociones. No ignorarlos.
- Aprovechar relaciones y soporte espiritual.
- Cuidar hábitos y acciones cotidianas.
- Consultar a la línea 192, opción 4 para atención inmediata.