La ley de seguridad vial o ley Julián Esteban representa la garantía de una movilidad segura para todos los colombianos.
Redacción Gestarsalud
En Colombia, los accidentes de tránsito ocupan el segundo lugar de muertes en personas entre 10 y 45 años, con más de 3.450 muertes registradas en el 2020. De hecho, en el país por cada muerte atribuida a covid-19 en personas menores de 20 años ese año, hubo cuatro veces más muertes por accidentes.
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Justamente por ello surgió el proyecto de ley 408 del 2021, conocido como la Ley de Julián Estaban, que fue ratificado como de interés por el Gobierno después de consultas con la sociedad civil e incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS), que le dio respaldo y afirmó que puede marcar el inicio del camino por lograr proteger las vidas en la vía.
La OMS destaca que está ley traerá cambios importantes para mejorar las medidas de seguridad vial y reducir las muertes en siniestros viales en el país, como el diseño de carreteras e infraestructura, los estándares de seguridad de los vehículos, las licencias de conducir y los datos sobre lesiones en Colombia a las recomendaciones globales.
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“Esta nueva ley crucial podría ayudar a salvar miles de vidas. Es un gran paso adelante para Colombia en el establecimiento del marco legislativo sólido que necesitamos para garantizar una movilidad segura para todos, y el establecimiento de un enfoque comprobado de sistemas seguros que salvan vidas para la seguridad vial”, dijo Gina Tambini, representante de la OMS y la OPS en Colombia.
¿Por qué la ley se llama Julián Esteban?
El proyecto de ley 401 lleva el nombre de Julián Esteban Gómez, un pequeño niño de 13 años que fue víctima de un accidente y murió mientras montaba en bicicleta en julio de 2021. El pequeño era un gran fanático de Egan Bernal, el primer colombiano y latinoamericano en ganar la carrera ciclista del Tour de Francia en 2019, pero este incidente apagó sus sueños para siempre. Su imagen hace unos años llorando tras el triunfo de Bernal se volvió viral y fue emblemática para las nuevas generaciones de ciclistas.
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La muerte de Julián motivó un fuerte impulso de la sociedad civil, senadores, representantes de la Cámara y beneficiarios apoyados por la Iniciativa Bloomberg para la Seguridad Vial Global que luego resultaría ser una ayuda para dar forma a lo que hoy es está ley.
“La Ley Julián Esteban nos ha unido para honrar la memoria de Julián y los otros 3.000 niños cuyas vidas perdimos en la última década. Este primer marco regulatorio, coherente y robusto, dará lugar a muchas más regulaciones para impulsar el derecho de todas las personas a moverse sin tener que morir en las carreteras”, dijo Mary Bottagisio, directora ejecutiva de la Fundación Liga Contra la Violencia Vial.
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Finalmente, la OMS-OPS apoyó la ley brindando asesoramiento técnico, datos y respaldo, incluso a representantes en el Congreso y los equipos que trabajan para los senadores y representantes encargados de redactar la ley.
“La seguridad vial es cosa de todos. Todos usamos las carreteras todos los días y todos podemos aportar nuestro granito de arena para que sean más seguras. Ninguna muerte en nuestras calles es aceptable”, dijo Gina Tambini de la OMS.