Hoy es el Día Mundial del Medio Ambiente. Fecha propicia para recordar que de todas las especies de animales que existen, la más evolucionada- el ser humano- ha resultado ser la más peligrosa y amenazante para el ecosistema de la Tierra. Las demás, por naturaleza, sólo aportan a que el medio ambiente continúe desarrollándose de manera perfecta.
Desde hace 46 años cada 5 de junio es la fecha elegida por la Organización de Naciones Unidas (ONU) para celebrar al medio ambiente, el objetivo es el de concienciar al mundo entero de lo importante que resulta el ecosistema ambiental para la permanencia de las especies, incluyendo la humana.
Datos aportados por la Alcaldía de Bogotá, demuestran que la cuarentena obligatoria que comenzó en Colombia a finales de marzo, le dio- en sus primeros días de restricciones máximas- un respiro a la ciudad. “Luego de 25 días de confinamiento, Bogotá reportó una atmósfera más limpia y menos ruido ambiental. Además, le ofreció una oportunidad de libertad a los animales silvestres que rodean la capital”. Es necesario recordar que, para entonces, la cantidad de vehículos circulando en la ciudad se redujo en un 80%, también buena parte de la actividad industrial.
Este año el tema para conmemorar el Día del Medio Ambiente es la biodiversidad y cuenta con Colombia como país anfitrión, por ser una de las naciones del mundo con mayor biodiversidad. Es el hogar de más 51 mil especies. Alberga la máxima variedad de aves y orquídeas del planeta y es la segunda nación en diversidad de plantas, mariposas, peces de agua dulce y anfibios. Esta abundancia de vida se despliega en más de 300 tipos de ecosistemas, algunos de los cuales permanecen inalterados en áreas protegidas.
Si bien el aislamiento al que muchos países han debido someterse para mitigar la propagación del Covid-19 ha colaborado para limpiar el aire que, en muchas grandes ciudades demuestra altos niveles de contaminación, también lo es que los mares, ríos y lagos comienzan a ser receptores de los desechos humanos en época de pandemia: evidencia de ello es la cantidad de insumos como tapabocas y guantes de látex usados a demanda mundial desde inicios de 2020 y que ahora aparecen en las aguas. Antes, estos materiales no se vislumbraban a la luz del planeta. Eran otros los protagonistas.
Las mejoras en la calidad del aire, agua y condiciones amables de todos los ecosistemas dependen únicamente de las acciones, haberes y formas que tiene el ser humano para promover sus intereses, por encima de los del planeta. Otras evidencias importantes, producto del aislamiento por el Covid-19, se dieron en China a principios de año. Durante el primer trimestre de 2020 el país asiático estuvo confinado y en ese momento la NASA y la Agencia Espacial Europea revelaron imágenes importantes, que demostraban una significativa disminución en los niveles de dióxido de nitrógeno sobre el país. Hay evidencias que muestran que el cambio está relacionado con la recesión económica tras el brote del nuevo Coronavirus.
Sigue siendo importante, entonces continuar con la promoción y campañas de concienciación que le permitan a la especie humana limitar su comportamiento, evaluando las complicaciones que éste, en muchos aspectos, ocasiona en el medio ambiente.