El linaje B.1.1.28.1, conocido como la P1 o variante brasileña, se identificó en los linajes obtenidos a partir de un total de 96 muestras secuenciadas, provenientes de los departamentos de Amazonas, Arauca, Atlántico, Chocó, Córdoba, Cesar, Guajira, Meta, Nariño, Quindío, San Andrés, Valle del Cauca y Bogotá. Todavía no está claro cómo esos nuevos linajes van a incidir en el número de casos y fallecimientos, sin embargo, la evidencia científica, publicada hasta ahora, indica que el virus no parece haberse vuelto resistente a las vacunas.
El INS confirmó, al final de la tarde del 29 de enero, la identificación del linaje B.1.1.28.1/P1, conocido como la variante brasileña, en una ciudadana de ese país quien acudió a buscar el servicio de salud en el hospital de Leticia. Se trata de una mujer de 24 años, colombo-brasilera y afiliada al régimen subsidiado de Colombia, quien cruzó la frontera y buscó atención médica en Colombia.
Su muestra para COVID-19 ingresó al laboratorio el 14 de enero y dio resultado positivo al día siguiente. Después de determinar que esta muestra reunía las condiciones requeridas, se debió esperar cuatro días para la recolección de 96 muestras en total e iniciar el estudio genómico el 19 de enero (estudio que dura 10 días) con resultado al finalizar la tarde del 29 de enero.
La paciente confirmó al equipo de vigilancia de Colombia que ella no estuvo en nuestro país sino hasta el día en que solicitó la atención médica en el hospital de Leticia.
La investigación epidemiológica de campo permitió establecer que la paciente permaneció en Brasil los últimos 30 días, a excepción del día en que recibió atención en salud y se le tomó la muestra. Los servicios de salud confirmaron que la paciente se encuentra recuperada de COVID-19 y que, además, se mantuvo en su domicilio, cumpliendo el aislamiento respectivo.
A la variante brasileña se le atribuye, de manera hipotética, el nuevo aumento de casos en la ciudad de Manaus; Brasil, que tuvo en su medición de seroprevalencia un 75 % de población que ya tenía anticuerpos. Sin embargo, esta ciudad fronteriza presentó un notorio incremento de casos, que inicialmente era inexplicable.
Marcela Mercado, directora de investigación en salud pública del INS, explicó que «todavía en el mundo no está claro cómo esos nuevos linajes van a incidir en el número de casos y fallecimientos, o si van a cambiar el curso de la pandemia. Nada ha reemplazado como principal causa de contagio, el contacto aumentado entre personas que se vio en los últimos 3 meses».
Por su parte, la directora del INS, Martha Ospina, agregó que la trasmisión aumentada favorece la aparición de más mutaciones. “El virus cada vez busca mayor perfeccionamiento evolutivo y el paso de una persona a otra le da esa oportunidad. Por eso, predomina la hipótesis de que las nuevas variantes son más contagiosas, más que la hipótesis que sugiere que estos nuevos linajes escapan a la inmunidad. Por lo que su control se basa en las medidas de protección ya conocidas”.
De igual forma, el INS insta y hace un llamado a la población de la triple frontera para que fortalezcan las medidas de autocuidado como son: el uso correcto del tapabocas, cubriendo nariz y boca, el lavado frecuente de manos, la distancia física de al menos dos metros entre personas, evitar aglomeraciones y reuniones familiares o de amigos, y mantener los espacios ventilados.