Colombia intensifica proceso de análisis y vigilancia que aseguran índices de mortalidad reales sobre Covid-19

En un afán por mantener datos reales sobre los índices de mortalidad por cuenta del Covid-19 y de ofrecer al control mundial datos reales al respecto, Colombia ha promovido un trabajo articulado sobre índices de mortalidad, que busca mantener la precisión sobre las cifras de muertes por el nuevo coronavirus. Se trata de un trabajo entre la Dirección de Epidemiologia y Demografía y el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), que da a corte del 31 de octubre, un total de 35.703 defunciones.

Tal y como lo ha explicado Julián Fernández Niño, director de Epidemiología y Demografía del Ministerio de Salud y Protección Social, Colombia ha venido haciendo un proceso de vigilancia demográfica, que consiste en analizar todas las muestras y hacer una reclasificación permanente, de ser el caso. Esto con el fin de identificar muertes sospechosas, de las cuales se detectan pruebas que no habían sido reportadas a tiempo.

“Lo anterior, sumado a la vigilancia clínica y epidemiológica, hace que algunas muertes sospechosas puedan pasar a ser confirmadas, siempre y cuando tengan prueba positiva. Este proceso es reflejo del interés de Colombia por mejorar el registro de mortalidad, de complementar, de hacer una búsqueda y una reclasificación robusta de las muertes metodológicamente sólida para tratar de identificar muertes confirmadas».
 

Julián Fernández Niño, director de Epidemiología y Demografía del MinSalud.

El país tiene un gran interés en demostrar, a través de sus registros de mortalidad- en este caso por Covid-19- la transparencia de sus sistemas de información. 

Se trata de un proceso que se da periódicamente con puntos de corte que permiten consolidar las muertes. Es un trabajo complementario al reporte diario, que, aunque se da en un tiempo más prolongado, tiene mayor precisión a la hora de entregar los datos definitivos.

El representante del MinSalud recordó que los reportes diarios de muertes que publica su despacho tienen la intención de demostrar transparencia sobre lo que es y ha sido la evolución de la nueva enfermedad en el país, no son datos definitivos pues requieren ser consolidados con la articulación detallada que se hace con el DANE.

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Se reconoce que el análisis de mortalidad es de importancia en salud pública y es un proceso continuo, dinámico y en actualización permanente. Éste exige consolidación con ciertos puntos de corte debido a:

  1. El rezago en el tiempo de mortalidad, a pesar de que en Colombia es muy bajo.
  2. La actualización que pueden hacer los médicos en cualquier momento con los certificados de defunción.
  3. La vigilancia demográfica de muertes.
  4. El proceso de reclasificación.

«Este proceso es complejo porque incluye aplicación de algoritmos clínicos, unidades de análisis de cada muerte, cruces de bases de datos y un proceso de clasificación de causa básica. El Minsalud y el DANE vienen trabajando desde hace varios meses de manera articulada para realizar este proceso de manera sincrónica y estandarizada, utilizando como fuente la base de RUAF-ND, que es administrada por la Dirección de Epidemiología y Demografía”.

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