Desde marzo, cuando comenzó la emergencia sanitaria y se cerraron las fronteras aéreas y terrestres en el país, los vuelos comerciales -nacionales e internacionales- quedaron suspendidos. Un fuerte impacto económico resultó de la medida, que buscó, en su momento, evitar más contagios de Covid-19 en el territorio nacional. Sin embargo, mientras que el virus avanza, se aplana y continúa su curso normal, él mismo ha demostrado sus implicaciones e impactos en las distintas dinámicas de la vida.
Así las cosas, en el país se manejan nuevas teorías en cuanto a la posibilidad de contagio del nuevo Coronavirus. Recientemente, Carlos Álvarez, médico infectólogo y asesor del Gobierno Nacional y de la Organización Mundial de la Salud sobre el Covid-19, aseguró que es más riesgoso contagiarse al viajar en bus o metro, que en un avión.
Basó su afirmación en el siguiente argumento: teniendo en cuenta el sistema de ventilación de los aviones, el riesgo real es solo para los que están sentados cerca a una persona asintomática y, además, va a depender también de la enfermedad. Generalmente entre más síntomas, más riesgo de transmisión.
Otra variable importante es el tiempo de exposición, entre más largo el viaje, mayor riesgo. Normalmente muchos brotes descritos aparecen en vuelos largos de más de tres horas, pero, fronteras adentro, la mayoría de los vuelos son de menos de una hora.
“Cuando se cumplen las normas de bioseguridad, se disminuye el riesgo de contagio. Con pruebas pilotos que se han hecho se demuestra que la probabilidad de contagio es muy baja».
Carlos Álvarez, asesor del Gobierno Nacional y de la Organización Mundial de la Salud sobre el Covid-19.
Las afirmaciones de Álvarez están alineadas con las de una investigación internacional (Barnett, 2020), que indica que la probabilidad de que un viajero se infecte de Covid-19 en un vuelo nacional de dos horas, usando tapabocas y con el avión lleno (excepto las sillas del medio), es de 0,00013%, es decir, una de cada 7.700 personas.
El experto infectólogo explicó que los aviones cuentan con esquemas de bioseguridad potentes. El aire pasa por un filtro HEPA (high efficiency particulate air filter) que atrapa el 99% de las partículas de 0,1 a 0,3 μm de diámetro y elimina hongos, bacterias y grandes partículas virales. “Incluso las que miden entre 0,01 μm y 0,1 μm usualmente permanecen unidas a partículas de polvo, proteínas o gotas de secreciones con diámetros lo suficientemente grandes para ser filtradas”.
En los aviones el recambio de aire por hora es de 15 a 20 veces -mayor que el de un edificio de oficinas- y cada ciclo elimina cerca de 63% de los microorganismos en aerosoles; por consiguiente, los filtros eliminan el 99,9% de los microorganismos introducidos por los pasajeros. “Probablemente cuando se han presentado contagios no ocurren dentro del avión sino en el aeropuerto cuando no tienen normas de bioseguridad y se permiten aglomeraciones. Pero si hay protocolos, ese riesgo también se minimiza y no es un foco de contagio».
Se reactivan vuelos internacionales
El Ministerio de Salud aceptó la solicitud que había enviado la Aeronáutica Civil el pasado 19 de agosto sobre restablecer la operación de vuelos internacionales. Según la cartera de salud, «no persisten las condiciones para mantener cerrados vuelos internacionales desde y hacia las grandes capitales del país ya que es muy poco probable que la llegada de pasajeros fuera del país aumente la tasa de contagios por Covid-19».
Según comentó la ministra de Transporte Ángela María Orozco al periódico El Colombiano “la Aerocivil está consultando país por país para saber cuáles permiten el ingreso y en qué condiciones. Será un tema de conversaciones bilaterales, pero aún no hay un cronograma específico de reactivación porque no depende exclusivamente de nosotros. Lo que sí tenemos claro es que se eliminaría la restricción de ingreso a partir del 1 de septiembre, que probablemente se exigiría prueba de Covid-19 y en ese sentido el primer aeropuerto que ha solicitado que lo tengamos en cuenta para reactivar vuelos internacionales es el de Cartagena. Otros alcaldes lo están analizando, pero solicitud escrita solamente ha llegado una”.