La salud pública ya traía una serie de retos y congestiones previa la coyuntura por Covid-19. La contingencia ha generado un conjunto de restricciones e impedimentos logísticos y emocionales que bloquean el acceso de algunas personas al sistema de salud.
En este sentido, el observatorio Pulso del Consumidor de SINNETIC, firma de analítica de datos, consultoría e investigación de mercados, estuvo explorando durante el mes de junio, las actividades de cuidado de salud, a las que los entrevistados han dejado de asistir o han pospuesto dada la situación actual.
- Medicina general: El 62% de los entrevistados reporta haber pospuesto o aplazado citas con médico general durante la cuarentena por temor a contagio en hospitales.
- Exámenes de laboratorio: El 46% de los entrevistados reporta haber aplazado exámenes de laboratorio clínico durante la cuarentena y restricción de movilidad.
- Consulta con especialistas: El 41% de los entrevistados, remitidos a especialistas, han postergado sus consultas.
Es importante resaltar que, se reporta un 18% de aplazamiento de sus citas de planificación familiar y por otro lado 22% ha pospuesto controles ginecológicos o citologías. Desde el punto de vista del cuidado infantil, el 26% ha pospuesto citas por temor a asistir con menores a algún consultorio y el 20% ha pospuesto inmunizaciones o vacunas por la misma causa.
Una reducción en la vacunación supone riesgos de aparición de infecciones actualmente controladas, mientras que aplazar diagnósticos podría suponer mayores costos al sistema de salud a futuro, bajo la consideración que el tratamiento temprano de diversas patologías es costo eficiente desde el punto de vista de salud pública.
En este orden de ideas, el estudio de SINNETIC apunta que la telemedicina y las tecnologías en salud emergen como una alternativa para facilitar el acceso de la población al sistema de salud. A este respecto, se indagó por la actitud frente al uso de telemedicina y recursos digitales prosalud, los resultados se muestran a continuación:
- La apertura más alta del usuario se ve hacia el comercio electrónico en salud. Cerca del 57% reporta apertura a comprar medicamentos con receta por internet y el 50% de los entrevistados registra buena actitud hacia la compra de medicamentos libres por el mismo canal.
- WhatsApp se convierte en un recurso de fácil acceso para la comunicación con médicos, ya que el 48% reporta buena actitud para usar este canal como mecanismo de acceso.
- El 33% de los entrevistados reporta apertura para consultar médicos especialistas por videoconferencia, y de igual forma, un 28% de los consultados se resiste a usar este canal como mecanismo de acceso a consulta especializada.
- En el caso de pediatría por videoconferencia, se evidencia un 29% de apertura versus un 20% de rechazo.
- Dermatología, posiblemente, es una de las especialidades con menor apertura a la teleconsulta con una actitud favorable del 25% de los entrevistados vs el 29% de rechazo.
Algunos de los problemas más comunes en teleconsulta son: 1. Difícil uso de las plataformas por parte del paciente (34%), 2. Parte de la consulta se van en las explicaciones que el medico debe hacer al paciente sobre como usar las plataformas (32%), 3. Dificultad de los pacientes para verbalizar sus síntomas (29%), 4. Cámaras de los celulares o computadores de los pacientes no permiten mostrar el color, tono etc., de síntomas que se diagnostican visualmente (17%), 5. Caídas de internet impiden una consulta fluida (12%).
De igual forma, el 38% de los consultados se muestran preocupados por la seguridad de sus historias clínicas e información confidencial, lo que puede significar un bloqueo para el uso de plataformas basadas en internet para acceder a tele consultas.
Al menos cinco pilares de intervención suponen el presente estudio:
- Privilegios de red para telemedicina, evitando que la congestión por el uso del canal afecte la fluidez de la consulta médica en línea.
- Mayor educación sobre salud, para que las personas cuenten con herramientas para expresar sus síntomas a la distancia.
- Seguridad informática, garantizando confidencialidad de expedientes médicos y gobierno de esta información.
- Integración con plataformas cotidianas como WhatsApp, para que la consulta médica no se interrumpa por ausencia de adaptación a funcionalidades de nuevas plataformas.
- Adaptación cultural del cuerpo médico, para orientar la entrevista de forma remota bajo las limitaciones de uso de sentidos como el tacto y la visión.