La economía no se puede paralizar de manera indefinida. Los sectores económicos y sociales del país están ideando estrategias para continuar. La educación también.
Las dinámicas sociales tienen que cambiar, el distanciamiento entre las personas debe mantenerse a pesar del levantamiento de la cuarentena. Uso indefinido y obligatorio de tapabocas y constante lavado de manos complementarán las medidas preventivas, sólo así podrá hablarse de responsabilidad ciudadana y podrá combatirse una de las enfermedades más contagiosas del mundo, el Covid-19.
A una semana de hacerse la reapertura gradual de los sectores económicos del país, el ministro de salud y protección social, Fernando Ruiz, aseguró que en este punto buena parte de la responsabilidad recae en la disciplina social.
Tras una cuarentena obligatoria de poco más de un mes, el Gobierno nacional ha decidido reactivar “progresivamente” la normalidad, pero nada tendrá éxito sin el compromiso ciudadano.
“Si nos lavamos las manos, mantenemos el aislamiento y usamos el tapabocas evitamos contagio y, de esa forma, ayudamos a seguir bajando la curva. Con la curva en descenso podremos tener una mejor posición para que los diferentes sectores puedan salir de una manera gradual. La gente estará saliendo, pero vamos a estar controlando y vigilando para tener mejores resultados a futuro».
Por ahora, y hasta el próximo 30 de mayo, las fronteras se mantienen cerradas, todas las clases están suspendidas, los adultos mayores de 70 años y personas con enfermedades crónicas deben mantenerse en sus casas, igual que los niños.
Aún no hay fecha para la activación y apertura de los vuelos domésticos, eventos públicos, discotecas, bares, iglesias y actividades que impliquen la reunión de personas ajenas a un núcleo familiar. Se mantienen las directrices de teletrabajo para todas aquellas empresas que así puedan operar. Deben mantenerse los protocolos de bioseguridad en la operación de industrias. El transporte público seguirá trabajando de manera limitada.
¿Qué pasará en Bogotá?
Bogotá, la ciudad con más casos de Covid-19 del país (mil 597 casos positivos) y una de las metrópolis más complejas por su extensión, capacidad empresarial, habitacional y poblacional (ocho millones de habitantes), requiere medidas adicionales y adecuadas a su realidad.
En este sentido, Claudia López, alcaldesa, permitirá la reapertura sólo de dos o tres sectores económicos de la ciudad. Aseguró que las acciones deben estar orientadas a evitar la conglomeración de personas en el transporte público y a promover el uso de vehículos particulares y bicicletas, razón por la cual los negocios de mantenimiento de bicicletas y vehículos podrán reactivarse. Transmilenio, por su parte, seguirá operando en un 35% de su capacidad total.
El sector de la construcción, donde trabajan unas 300 mil personas, es otro de los sectores beneficiados con el levantamiento de la cuarentena, pues las labores pueden realizarse manteniendo un distanciamiento físico de un metro o más. Al igual que lo advirtió el Gobierno nacional, López aseguró que, si la capacidad de las Unidades de Cuidados Intensivos alcanza el 70%, se activará de nuevo la cuarentena para todos los sectores.
«Bogotá y Cundinamarca van a seguir en cuarentena. Yo se que el costo es grande pero tenemos que cuidarnos con mucha prudencia porque de lo contrario la calamidad a la que nos enfrentamos sería mucho peor», sentenció López.