Los comportamientos o actitudes que realizamos diariamente están relacionados con nuestro estilo de vida, no obstante, algunos de ellos no son saludables ocasionándonos problemas de salud, como la inactividad física o el consumo de tabaco y alcohol, que desencadenan las principales enfermedades crónicas no transmisibles entre ellas la hipertensión, diabetes, EPOC y cáncer.
Como todos somos responsables de nuestra salud y la de quienes nos rodean, en el marco de la celebración de la Semana de Estilos de Vida Saludable, promovida por el Ministerio de Salud y Protección Social, Asmet Salud le entrega pautas básicas para mejorar sus hábitos y generar comportamientos sanos que le permitirán tener una vida saludable y mejor calidad de vida y a su vez, reducir el riesgo de presentar enfermedades crónicas.
Estas son las principales recomendaciones para mejorar su calidad de vida, tome nota y póngalas en práctica:
1. Aliméntese saludablemente: Trate de consumir diferentes tipos de alimentos en cada comida, estos le dan energía al cuerpo para que pueda realizar todas las funciones. Prefiera los alimentos sudados y cocinados –no fritos-, para ello retírele la piel al pollo y los gordos a la carne. Estas grasas y las de las comidas rápidas elevan el colesterol malo y pueden causar enfermedades del corazón.
Limite el consumo de sal ya que ésta puede elevar la presión arterial. Reemplace la sal por limón, laurel, tomillo, orégano, cebolla, ajo, perejil, entre otros. Consuma grandes porciones de frutas.
2. Realice ejercicio físico: El ejercicio ayuda a controlar el peso, a reducir el riesgo de enfermedades del corazón, a evitar la diabetes tipo 2, la hipertensión arterial, ciertos tipos de cáncer, fortalece nuestros huesos y músculos, reduce el estrés y la depresión y mejora la memoria.
Debe empezar con sesiones cortas de 10-15 minutos y aumentar poco a poco hasta que mejore el estado físico.
Es mejor que haga algo que le guste como caminar, trotar al aire libre o, si lo prefiere en casa. Para ello procure utilizar ropa cómoda y zapatos adecuados. La idea es llegar a realizar 150 minutos semanales de ejercicio, lo que equivale a 30 minutos 5 veces a la semana.
3. Beba agua potable: Es el consejo más y simple de la salud pública para prevenir enfermedades que se transmiten con el agua, en especial las parasitosis y las bacterias. Use agua segura y trátela adecuadamente.
Láveselas manos antes de preparar alimentos y después de ir al baño y promueva esta práctica en la familia y en la comunidad.
4. Evite el consumo de alcohol, cigarrillo o sustancias psicoactivas: El alcohol y el cigarrillo contienen sustancias que afectan los diferentes órganos del cuerpo, además su consumo puede causar dependencia y convertirse en adicción.
El alcohol puede causar daño del hígado, los riñones, el páncreas. Las drogas psicoactivas y el consumo de alcohol no solo producen daño en la salud de los que lo consumen sino a sus familias y la comunidad en general.
5. Aprenda a controlar el estrés: El estrés afecta el corazón, el cerebro, el sistema nervioso y disminuye las defensas del cuerpo, lo que aumenta el riesgo de enfermarse.
Aprenda a controlar las presiones a través de la respiración profunda, la realización del ejercicio, meditación, descanso, entre otros.
6. Utilice adecuadamente su tiempo libre: Tómese su tiempo para descansar, compartir con su familia, realizar actividades al aire libre, asistir a actos culturales y en general, realizar actividades diferentes a las del hogar o el trabajo.
Dedique su tiempo a realizar actividades que le gusten tales como leer, aprender a cocinar, cantar, jugar dominó, bingo, lotería, arreglar las plantas, hacer dibujos, entre otros.
7. Viva una sexualidad segura, responsable y con amor: La sexualidad es parte inherente del ser humano, pero debe ejercerse con responsabilidad.
Se debe ser respetuoso con los que nos rodean y denunciar los abusos.
Fuente: AsmetSalud