La distribución de la vacuna contra el Covid-19 es, sin duda, el reto logístico más grande del mundo. La complejidad de la distribución, conservación y efectiva aplicación han hecho pensar a los gobiernos en idear las mejores estrategias para recibir el antídoto. Las farmacéuticas han planteado sus desarrollos a partir de distintas tecnologías: algunas han funcionado, otras siguen dando efectividad en sus fases de estudio, pero todas se comportan de manera diferente.
En medio de la pandemia más importante del siglo XXI y la primera causa de muerte en el mundo en el año 2020, la distribución de la vacuna también afronta desafíos como la escasez, la falsificación, la contaminación y la especulación. Cada farmacéutica se ha dedicado a firmar contratos de confidencialidad y compra con distintos países y con ellos se han encargado de definir cuáles son las empresas encargadas de llevar el antídoto hacia el país de origen. Por su parte, los Estados están en la obligación de garantizar el almacenamiento, distribución y la puesta en marcha de sistemas efectivos para controlar, rastrear, monitorear y auditar sus inventarios.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y los entes reguladores de cada país y continente tienen la responsabilidad, de la mano de las carteras de salud, de velar que cada dosis sea contabilizada y aplicada, cumpliendo con la rigurosidad de conservación requerida. Aunque los organismos internacionales han informado cuáles deben ser los parámetros de priorización para lograr una inmunidad de rebaño efectiva, cada país es libre de decidir sus políticas sanitarias para aplicar el antídoto.
La revista Scientific American consultó a Julie Swann, profesora de la Universidad de Carolina del Norte y especialista en cadenas de suministros en el área de la salud, sobre los retos de llevar las vacunas a toda la población estadounidense y una de sus conclusiones apunta a la falta de comunicación entre los sistemas que tiene cada laboratorio y los de cada estado.
“Existe un sistema para solicitar y enviar vacunas, pero no dice nada después de que una vacuna ha llegado a un lugar. Luego, cada estado usa su propio sistema para registrar quién recibe la vacuna, que se denomina registro de inmunización. Estos dos sistemas no se comunican entre sí, por lo que, sin la adición de otro nivel, es difícil para los estados controlar la existencia de las vacunas”, asegura la experta que trabajó con los CDC durante la emergencia de H1N1 en 2009.
El Mecanismo Covax, firmado por 142 países y la OMS, es una de las herramientas más importantes para garantizar la correcta distribución de la vacuna. Esta organización tiene grandes victorias en su programa de precalificación para evaluar la seguridad, la calidad y la eficacia de los biológicos que son distribuidas por la Alianza Mundial de Vacunas en Ginebra; Suiza. El programa se implementó en 2001 para mejorar el acceso a medicamentos para el SIDA, la malaria y la tuberculosis, y en 2019 se utilizó para acelerar la adopción de la vacuna contra el ébola. Pero, muchas otras dosis serán distribuidas fuera de este marco de negociación y es ahí donde se hace necesaria la rigurosidad en el conteo y control de las dosis distribuidas.
La OMS / OPS, UNISEF, el Banco Mundial y The Vaccine Alliance (Gavi) desarrollaron la herramienta de evaluación de la preparación para la introducción de vacunas COVID-19 (VIRAT2). Una herramienta que pretende ayudar a los países en la introducción de la vacuna contra el nuevo Coronavirus. Proporciona una hoja de ruta para la introducción y un marco estructurado para que los países puedan monitorear sus progresos en materia de preparación en función de hitos fundamentales. Incluye una plantilla de Excel para que los ministerios de salud la completen con el apoyo de socios y las oficinas de la OPS en los países.
El tablero VIRAT ayuda a los países a resaltar las actividades críticas y las áreas técnicas que deben iniciarse, continuarse o fortalecerse. Además, permite a la OPS y a sus socios determinar las esferas en que puede necesitarse apoyo e identificar formas alternativas de movilizar recursos.
Otras iniciativas importantes
Google comenzó a desplegar paneles informativos y otros recursos sobre las vacunas del Covid-19 en su buscador en Reino Unido; por ser este el primer país que comenzó con el proceso de inmunización en el mundo.
“Desde el brote de Covid-19, los equipos de Google han trabajado para proporcionar información y recursos de calidad para ayudar a mantener a las personas seguras y para brindar a la salud pública, los científicos y los profesionales médicos herramientas para combatir la pandemia”.
Asegura Google que a medida que el mundo se centra en el despliegue de vacunas, el tipo de información que la gente necesita evolucionará. Las comunidades serán vacunadas a un ritmo y escala sin precedentes. Esto requerirá compartir información para educar al público, lo que incluye abordar las percepciones erróneas y las dudas sobre las vacunas y ayudar a que las personas obtengan orientación oficial sobre cuándo, dónde y cómo vacunarse.
“Comenzando en el Reino Unido, estamos lanzando una nueva función en la búsqueda, por lo que cuando las personas busquen información sobre las vacunas Covid-19, mostraremos una lista de vacunas autorizadas en su ubicación, así como paneles de información sobre cada vacuna individual. A medida que otras autoridades sanitarias comiencen a autorizar vacunas, presentaremos esta nueva función en más países”.