Según estudio en ‘The Lancet’, el riesgo fue significativamente diferente al de las personas que recibieron otras vacunas.
Redacción Gestarsalud
En el mundo se han aplicado más de 10 mil millones de dosis contra el covid-19 que han salvado a miles de millones de vidas hasta marzo de 2022. Estas vacunas han demostrado ser seguras y causar efectos secundarios leves y usuales, sin embargo, en algunos muy raros casos se han presentado casos de miopericarditis.
La miocarditis es una inflamación del músculo cardiaco y la pericarditis es una inflamación de la capa exterior que recubre el corazón, y en ambos casos el sistema inmunitario del organismo causa la inflamación de estas partes en respuesta a una infección o algún otro desencadenante.
Y si bien los reportes de farmacovigilancia ya habían confirmado que este efecto es de una frecuencia muy poco común, una revisión sistemática y metaanálisis publicado en ‘The Lancet’ demostró que la incidencia de miopericarditis en personas que recibieron vacunas contra el covid-19 fue rara y no fue significativamente diferente de las personas que recibieron otras vacunas. De hecho, su incidencia fue menor que la de las personas que recibieron vacunas contra la viruela.
El estudio, en concreto, buscó comparar la incidencia de miopericarditis después de la vacunación contra el covid-19 frente al riesgo de esta condición después de la vacunación contra otras enfermedades.
Los autores de esta revisión determinaron que el riesgo general de miopericarditis no parece ser diferente para este nuevo grupo de vacunas covid-19 que para las vacunas tradicionales contra otros patógenos.
“La miopericarditis es una complicación rara de la vacunación. Sin embargo, ha habido cada vez más informes de miopericarditis después de la vacunación contra el covid-19 especialmente entre adolescentes y adultos jóvenes, por eso nuestro objetivo fue caracterizar la incidencia de miopericarditis después de la vacunación con covid-19 y compararla con la vacunación sin covid-19”, explicaron los autores.
¿Qué mostraron los resultados?
Los autores explican que la incidencia global de miopericarditis fue de 33,3 casos por cada millón de dosis de vacuna aplicadas, encontrando que la incidencia combinada de miopericarditis para las vacunas covid-19 y no covid-19 no cambió significativamente.
Así las cosas, entre los 260 millones de personas que recibieron más de 405 millones de dosis de vacunas, según lo informado en estudios y bases de datos, encontraron que la incidencia de miopericarditis no fue elevada después de la vacunación contra covid-19 (18 casos por millón de dosis de vacuna) en comparación con otras vacunas.
“La incidencia general de miopericarditis en la población general no difirió significativamente después de recibir las vacunas contra el covid-19 en comparación con otras vacunas”, ratificaron los autores.
Sin embargo, entre las vacunas de covid-19, la incidencia de miopericarditis fue significativamente mayor entre quienes recibieron vacunas de ARNm.
Por otro lado, se evidenció que los casos de miopericarditis fueron significativamente mayores en personas menores de 30 años y en este grupo la incidencia fue aproximadamente diez veces mayor en hombres que en mujeres. Para las personas mayores de 30 años, la incidencia fue alrededor de tres veces mayor en hombres que en mujeres.
No obstante, estudios previos han demostrado que la miocarditis después de la segunda dosis de una vacuna de ARNm contra el covid-19 ocurre clínicamente en aproximadamente 1 de cada 10.000 hombres jóvenes.
Hay que tener en cuenta que entre la población general, la incidencia previa a la pandemia de miopericarditis varía mucho según la edad y el sexo, y que además es posible que se haya subestimado la existencia de miopericarditis antes de la aplicación de la vacuna contra el covid-19. Esto quiere decir que la miopericarditis relacionada con la vacunación contra la covid-19 no siempre puede confirmar un diagnóstico de miopericarditis inducida por la vacuna, ya que es difícil distinguirla de la miopericarditis por otras causas.
“Nuestra revisión sistemática y metaanálisis mostraron que la incidencia de miopericarditis en personas que recibieron vacunas contra el covid-19 no fue significativamente diferente de la de las personas que recibieron otras vacunas, y fue menor que la de las personas que recibieron vacunas contra la viruela”, ratifican los autores.
“Por lo tanto, el riesgo general de miopericarditis no parece ser diferente para este nuevo grupo de vacunas contra el covid-19 que para las vacunas tradicionales contra otros patógenos. También encontramos que los hombres jóvenes tienen una mayor incidencia de miopericarditis que otros que reciben vacunas de ARNm covid-19”, enfatizan.
Los autores revisaron 4.919 estudios, 156 publicaciones de texto completo y en el metaanálisis se incluyeron 22 estudios observacionales con un total de 405’272.721 dosis de vacunas.