Ministerio de Salud indicó que capitales muestran incremento de casos e insistió en necesidad de recibir dosis de refuerzo.
Redacción Gestarsalud
Luego de cuatro meses de baja transmisión, baja mortalidad y pocas muertes por covid-19 en la mayoría del país, Colombia se enfrenta a la posibilidad de un aumento explosivo de infecciones por la presencia de la variante Ómicron, tal como ha sucedido en otros países.
Así lo confirmó el Ministerio de Salud este miércoles durante un Puesto de Mando Unificado (PMU) convocado para dar a conocer, por un lado, las primeras señales de un pico de Ómicron en el país y, por el otro, hacer un llamado de preparación a los actores del sistema de salud por las implicaciones que este escenario puede traer.
El director de epidemiología del Ministerio, Julián Fernández, mostró datos que evidencian un aumento en el número de infecciones y de la positividad en las principales ciudades capitales del país. En Medellín, por ejemplo, el número de positivos entre el número de pruebas hechas ya están en un 11 por ciento, en Bogotá en 6,3 por ciento y en Cali en 7,7 por ciento.
Y si bien vienen aumentando los casos de covid-19 en Colombia, las hospitalizaciones, los ingresos a UCI y la mortalidad permanece estable en los bajos niveles de las últimas semanas, insistió el Ministerio.
Fernández y el ministro Fernando Ruiz fueron claros en que lo más probable es que la aceleración de las infecciones en Colombia sea explosiva en las próximas semanas, como ha sucedido en los países que han confirmado la presencia de Ómicron.
De esta variante del covid-19 se sabe, por ahora, que por sus mutaciones puede ser de cinco a 10 veces más contagiosa que versiones previas del coronavirus, pero también que puede ser menos severa (síntomas más leves y menos riesgo de hospitalización, ingreso a UCI y muerte).
Sin embargo, aunque se presume que la severidad de una infección con Ómicron es menor, no se puede enviar un mensaje de relajación porque un gran pico de casos puede generar en términos absolutos un aumento en el riesgo de la población no vacunada y en la que tiene esquemas incompletos o no se ha aplicado la dosis de refuerzo.
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Las implicaciones
En el PMU, las autoridades de salud recalcaron que si bien el contexto colombiano es particular, con un avance en la vacunación de más de la mitad de la población con esquemas completos y alto grado de antecedentes de infección, algunas características de Ómicron plantean retos, según ha mostrado la experiencia de otros países.
En ese sentido, se alertó que las festividades de fin de año, que aun no acaban, han promovido el aumento de las interacciones, de la circulación de personas y de la realización de eventos en espacios abiertos y cerrados, lo que puede incidir en tener mayores niveles de contagios con una variante que podría ser dominante en poco tiempo.
A eso se suma que los estudios científicos recientes han sugerido que la infección con Ómicron tiene un tiempo de incubación menor que las versiones previas del virus (de apenas un par de días) al parecer por una mayor facilidad para adherirse a las células humanas y, por tanto, ostenta más rapidez para contagiar a otros.
En todo caso, lo que ha encontrado la ciencia es que las personas que tienen sus esquemas completos así como la combinación de vacunas y antecedente de infección tienen un menor riesgo de desarrollar formas severas de la enfermedad en comparación con las personas no vacunadas.
En otras palabras, Ómicron, aunque se presume leve, genera un riesgo alto para las personas sin vacunar y para aquellos con comorbilidades y mayores de 50 años que aun no han recibido su dosis de refuerzo. En Colombia se estima que son más de 4 millones las que no han ido por esa nueva inyección.
Ante ese escenario probable de un gran número de infecciones leves y algunas complicadas, sobre todo en no vacunados o personas de alto riesgo, es posible que se presente una alta demanda de los servicios hospitalarios, sobre todo en consulta externa, afirmó el ministro Ruiz.
También es previsible que los trabajadores de la salud, que ya están recibiendo masivamente sus dosis de refuerzo, comiencen a generar incapacidades laborales, no por síntomas graves, sino por la necesidad de aislamiento que se requiere.
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Las recomendaciones
Por esa razón, la principal recomendación para enfrentar la amenaza de Ómicron es acceder a la vacunación con esquemas completos y refuerzos, anotando que en Colombia hay disponibles más de 10 millones de dosis para ser aplicadas.
Otra recomendación importante es que toda persona con síntomas de gripa o resfriado -que podrían ser similares a los de Ómicron- se aísle para evitar infectar a otros y se comunique con su EPS para solicitar la prueba de covid-19.
En el caso de las personas sintomáticas el Ministerio recordó que si da negativo en el test de antígeno debe practicarse una PCR. Esto último porque se ha visto un incremento en los llamados falsos negativos de los resultados de estas pruebas y se hace necesaria la confirmación diagnóstica.
En este caso, hay un llamado especial a las EPS para que logren un buen tiempo de oportunidad en la entrega de resultados de las pruebas y para que estén preparados para un posible incremento en las solicitudes de información a través de sus canales de atención.
Y el llamado final que hizo el Ministerio de Salud, pero no menos importante, es para el grueso de la población, para que siga asistiendo a recibir sus dosis y también para que mantengan las medidas de autocuidado ya conocidas: uso de tapabocas en lugares de afluencia masiva, ventilación adecuada de los espacios y aislamiento en caso de síntomas respiratorios.
Para las personas con antecedente de infección también se recalca la importancia de la vacunación, teniendo en cuenta que Ómicron genera un riesgo de infección nunca antes visto con el covid-19.
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