Tres nuevas medidas comenzaron a regir a partir de ayer en la capital colombiana, en un intento de frenar la propagación desacelerada que tiene el Covid-19 en la ciudad. Claudia López, alcaldesa de Bogotá, anunció que, además de la cuarentena sectorizada que va funcionando desde el pasado 13 de julio y hasta el próximo 14 de agosto, tres nuevas reglas entran a controlar, aún más, la movilidad de las personas.
A través del Decreto 176 de 2020 el ayuntamiento ordenó aislamiento preventivo y obligatorio para todas las personas del grupo familiar en el que haya algún caso positivo de Covid-19, con o sin prueba diagnóstica. Con esta medida se busca controlar los cercos epidemiológicos, para evitar que estas personas- con altas probabilidades de estar infectadas- continúen la cadena de contagio. En este sentido, quienes tengan a un familiar enfermo de Covid-19 en sus casas, aunque no presenten síntomas deben permanecer aislados por los siguientes 14 días.
“En Bogotá, desde ahora, en los hogares donde haya una persona positiva, la familia completa debe hacer cuarentena con ella. Todo contacto estrecho con un positivo de Coronavirus debe quedarse en casa 14 días, con o sin prueba”.
La segunda medida de aislamiento va dirigida a las personas con diabetes, hipertensión y obesidad. Según la Secretaría de Salud, de las dos mil 196 personas fallecidas por el nuevo Coronavirus, hasta el 26 de julio, 547 eran hipertensas, 331 diabéticos y 176 presentaban algún grado de obesidad. Frente a este panorama, López explicó que las personas con estas patologías deberán quedarse en casa y tomar todas las medidas de autocuidado (distanciamiento y el uso del tapabocas) muy en serio.
“Independientemente de la localidad donde vivan, las personas con hipertensión, obesidad o diabetes deben quedarse en casa por su condición médica. Más que un llamado a la vigilancia, es un llamado a la conciencia de entender los riegos a los que nos estamos enfrentando”.
La tercera medida que contempla el Decreto 176 está relacionada con el mejoramiento de los mapas epidemiológicos de los casos positivos, que permitan conocer los contactos estrechos fuera de su núcleo familiar.
Para poder identificarlos se les solicita a los ciudadanos que, por medio de la página de Bogotá Cuidadora, no solo reporten sus síntomas sino también a sus contactos, de modo que sea posible establecer a todas estas personas y cuidarlas.
La infracción de las medidas se sancionará por los alcaldes con multas hasta de dos salarios legales mínimos mensuales.
¿Y las condiciones laborales?
La estabilidad laboral es un tema álgido en una coyuntura sanitaria que lo ha puesto en juego. Si bien el Ministerio de Salud y Protección Social hace un año informó que en Bogotá había cerca de 779 mil 559 personas hipertensas y 240 mil 287 personas diabéticas, ¿cómo quedan las condiciones laborales de personas activas y con responsabilidades económicas que no dan espera?
El Decreto anunciado ayer por la Alcaldía de Bogotá hace referencia a las facilidades que el empleador debe ofrecer al empleado para trabajar desde casa:
«Los empleadores de la ciudad de Bogotá D.C. son corresponsables de la gestión del riesgo y se encuentran obligados a adelantar sus actividades económicas bajo los principios de precaución, solidaridad y autoprotección de acuerdo con lo previsto en el artículo 2º de la Ley 1523 de 2012. En razón a ello, establecerán cuando sea posible, mecanismos de teletrabajo o trabajo en casa para los trabajadores diagnosticados con hipertensión, diabetes, obesidad o sean mayores de 60 años».
“…Así mismo, (los empleadores) tendrán en cuenta las directrices impartidas por el Ministerio del Trabajo encaminadas a proteger al trabajador y evitar su desvinculación por dar cumplimiento a los mecanismos de autocuidado, considerando que se trata de una situación temporal y que el derecho al trabajo impone deberes exigibles a toda la sociedad».