Por Diana Pérez, a través de El Tiempo.
Los últimos estudios realizados por la Asociación de Medicina del Deporte Colombia (Amedco) confirmaron lo que todos los padres sospechaban: los niños están adquiriendo malos hábitos durante el aislamiento preventivo.
Estar alejados de sus actividades recurrentes, así como la limitación de estar al aire libre llevó a los menores a un incremento significativo del tiempo que pasan frente a dispositivos electrónicos, una disminución de la actividad física y, por ende, al aumento de peso. Estos tres factores resultan preocupantes en la medida en que, según los autores del estudio, los hábitos para una vida saludable se adquieren desde la niñez.
Para el presidente de Amedco y coautor de la investigación, el médico del deporte Harold Arévalo, “es en la edad escolar, de 6 a 12 años cuando se forman las principales características de la disciplina, el respeto por la autoridad, la responsabilidad sobre sí mismos y su cuidado”.
Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), si bien los niños son más sintomáticos y transmisores de las enfermedades respiratorias comunes, esta realidad no se cumple con el coronavirus, pues los reportes hasta ahora en la mayoría de países del mundo demuestran que los niños tienen una tendencia a manifestar de forma más leve la infección.
En el país, el Gobierno nacional ha ido flexibilizando las medidas del aislamiento paulatinamente, lo cual incluyó la autorización para que niños y jóvenes puedan realizar actividades al aire libre tres veces a la semana durante 30 minutos. No obstante, está prohibido el uso de patines, balones, bicicletas y los juegos de los parques.
Es importante resaltar que deben usar tapabocas, mantener el distanciamiento de al menos dos metros y no alejarse del hogar en un perímetro mayor a un kilómetro. Al regresar a casa deben lavarse las manos, lavar las suelas de los zapatos, cambiarse de ropa y, preferiblemente, bañarse.
El análisis de Ademco permitió establecer que apenas el 13% de los padres reportan que sus hijos han superado los 60 minutos recomendados de actividad física, en tanto que una abrumadora mayoría de 75,2% afirma que sus hijos no llegan al mínimo recomendado.
Este es un panorama bastante desalentador
“Es evidente que este período de cuarentena, superior a los 100 días, dejará un lastre de inactividad de alto impacto en los niños, pues saldrán del confinamiento con una menor aptitud cardiorrespiratoria y con músculos menos fuertes, entre otras consecuencias”, comenta Harold Arévalo.
Por otra parte, Miguel Urbina Triana, expresidente Sociedad Colombiana de Cardiología, señala que esto puede traducirse en un aprendizaje negativo de comportamientos sedentarios. “Acumular más tiempo de ocio improductivo es perder el valioso contacto con la naturaleza y el medio ambiente”.
Una mayoría del 82,4% de los padres consultados asegura que sus hijos superan más de 60 minutos frente al televisor, computador, celular o videojuegos.
Para la Academia Americana de Pediatría, los menores de dos años nunca deberían estar expuestos a las pantallas: ni móviles, ni tabletas, ni televisores, ni siquiera para comer. Entre los 2 y los 5 años el tiempo máximo de dispositivos móviles no debe superar los 30 minutos al día, y siempre bajo la supervisión de un adulto para explicar el contenido. Para la edad escolar (6-12 años), quienes mayoritariamente respondieron la encuesta, la entidad sostiene que ese tiempo no debe superar 60 minutos al día y señala que más tiempo favorece el sedentarismo y la obesidad.
La Encuesta Nacional de Situación Nutricional (Ensin 2015) ya había puesto en evidencia que el 67,7% de los niños colombianos de 5 a 12 años pasaban tiempo excesivo frente a las pantallas, un porcentaje que se elevaba a 76,6% en los jóvenes de 13 a 17 años.
En este sentido, el 44% de los padres de niños en edad escolar que aceptan que sus hijos se han subido entre 1 y 3 kilos durante los más de 100 días de confinamiento, el 50% restante asegura que sus hijos mantienen su peso.
“El período de aislamiento puede favorecer de manera muy significativa los comportamientos sedentarios con menos actividad física y más tiempo dedicado a los dispositivos móviles, como consecuencia tendremos más jóvenes familiarizados con el control de un ‘joystick’ que lanzando una pelota”, sostuvo Juan Carlos Santacruz, director de la Fundación Colombiana del Corazón.
Según el cardiólogo Miguel Urbina, en estos tiempos se impone la necesidad de realizar estrategias para incrementar la actividad física en casa, así como también la educación nutricional para aprender sobre dietas balanceadas, más aún si se requiere mantener o prolongar este aislamiento en el futuro.
Las recomendaciones
Todas las recomendaciones han llegado a la conclusión de que es imprescindible que los jóvenes en edad escolar (de 6 a 17 años) inviertan 60 minutos o más cada día en actividades físicas de moderadas a vigorosas porque tienen beneficios sustanciales para la salud. Deben combinarse actividades aeróbicas con ejercicios de fortalecimiento óseo y muscular.
Tanto la Asociación de Medicina del deporte de Colombia como la Fundación Colombiana del Corazón coinciden en que se debe priorizar la apropiación de estilos de vida para el cuidado de la salud para sembrar en los niños conductas saludables que puedan mantenerse en su edad adulta.
El médico Harold Arévalo, a su vez, recomienda también fijarse en la rutina nocturna de los niños y adolescentes durante el confinamiento. “No acumular las horas de sueño diarias puede desembocar en problemas del comportamiento, de salud y de control de emociones como irritabilidad, dificultad para concentrarse, hipertensión, obesidad, dolores de cabeza y depresión.
Los niños que duermen bien logran tener un sistema inmunitario más sano, que tiene como consecuencia un mejor rendimiento académico, comportamiento, memoria y salud mental”, concluye.
Algunos consejos
1. En casa o al aire libre, es necesario que los niños hagan ejercicio durante mínimo una hora al día. Los juegos deportivos y algunos videojuegos o simuladores son una buena opción.
2. Póngale atención a la alimentación. Los niños tienden a comer más comida ‘chatarra’ si se la pasan todo el día encerrados. Ajuste una dieta sana para toda la casa.
3. Si por algún motivo no es fácil que sus hijos salgan, una buena opción es hacer ejercicio en familia, lo que sería saludable para todos.
4. Ojo con el sueño de los niños. Bajarle al ejercicio es también deteriorar la calidad del sueño en una edad en la que este es clave.