Mantener la calma es el llamado de las autoridades nacionales ante la inminente llegada del Coronavirus al país. De la mano de acciones ciudadanas orientadas a mantenerse bien informados para poder ejecutar con responsabilidad la propagación del virus, Colombia debe mantener sus actividades al día, a objeto de no caer en una recesión económica innecesaria.
El Ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruíz Gómez, asegura que no es momento de preocuparse por una futura recesión nacional. Asegura que hay suficientes medicamentos para atender la llegada del virus y los mecanismos de contención suficientes, los cuales, de la mano de la conciencia ciudadana, deben mantener índices normales de contagios del virus.
Esta puede ser la epidemia de la recesión sino se trabaja adecuadamente, aseguran las autoridades, al tiempo que consideran que las redes sociales han generado pánico ante un virus que, con el manejo pertinente, se puede controlar.
El llamado es a la calma. Las actividades turísticas y económicas deben avanzar de la manera más normal posible. No es necesario paralizar al país ni dejarse llevar por extremos de actuaciones políticas como cerrar fronteras. No hay evidencias de que estas acciones hayan sido útiles en la prevención de enfermedades, dicen los expertos.
«Las redes sociales han generado pánico ante un virus que,
con el manejo pertinente, se puede controlar»
El ministro Ruíz asegura que la estructura del sistema de salud nacional está organizada para atender los casos que puedan aparecer. Las medidas de prevención reiteradas a la ciudadanía- de la mano con los planes de contención- serán clave para el control de la situación.
«El Estado debe ser prudente para no generar mayores dificultades ni afectar la economía nacional. El control esta en Ministerio de Salud, sin embargo, es necesario tener consideración con no afectar la estabilidad económica», recalcó el ministro.
Situación mundial
China, la segunda potencia mundial, debería crecer un 4,9% en 2020, 0,8 puntos porcentuales menos que en la anterior previsión, indicó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.
A mediados de febrero, la Organización Internacional de la Aviación Civil indicó que la epidemia podría provocar una caída de entre 4.000 y 5.000 millones de dólares de ingresos de las compañías aéreas mundiales.
Por su parte, la consultora Capital Economics, con sede en Londres, estima que el brote costará más de US$280.000 millones en solo los primeros tres meses de 2020. Eso es más que todo el presupuesto anual de la Unión Europea, los ingresos anuales de Microsoft o Apple, y ocho veces el presupuesto anual del gobierno nigeriano.
Pero las predicciones locales son más positivas. Asegura el ministro de Salud que como es habitual en el comportamiento de una epidemia, hay picos y bajadas. No se atreven a predecir impactos económicos ni desabastecimiento ante la situación de China. Esperan, por el contrario, que el virus empiece a descender en la región oriental.
Frente tanta incertidumbre lo que sí es cierto es que unas recientes fotografías satelitales de la NASA muestran que se han producido disminuciones récord en la actividad fabril de China a medida que los fabricantes dejan de trabajar en un intento por contener el Coronavirus. Según la BBC, las imágenes reflejan niveles decrecientes de dióxido de nitrógeno este año sobre la ubicación de del país oriental, lo que repercute positivamente en la salud de la población.