Adolescencia y maternidad, un asunto de salud pública en Colombia

El 17,4 por ciento de mujeres entre 15 y 19 años ya son madres o han estado embarazadas.

Es un problema mayor. Concretamente de salud pública, que impacta en una pobreza que se recicla en todas las aristas de la sociedad. Se trata del embarazo en adolescentes, que ubica al país a la cabeza de un preocupante escalafón en el que una de cada cinco mujeres, de acuerdo con el Dane, ha estado embarazada al menos una vez en la vida.

De acuerdo con la Federación Colombiana de Obstetricia y Ginecología (Fecolsog), la maternidad precoz es, en muchos casos, el resultado de núcleos familiares disfuncionales. Y estas madres se enfrentan con limitaciones en el sistema educativo y el mundo laboral.

“Debe haber una política de Estado dentro de un contexto intersectorial en el que el centro sean las propias adolescentes y sus problemáticas”, dijo Armando Solano, presidente de dicha entidad.

Según el mi smo Dane, de todos estos embarazos más de las dos terceras partes no son deseados, con el agravante de que muchos de ellos son producidos por relaciones entre los adolescentes, y en otros, son fruto de relaciones francamente delictivas si se tiene en cuenta que muchos hombres son mayores de edad. Según datos del Dane, 99,2 por ciento de las adolescentes, tienen hijos con adultos. Otro dato relevante: el 40 por ciento de los embarazos adolescentes son deseados.

En palabras de la doctora Sandra Gómez, ginecóloga y especialista en medicina reproductiva, aunque la Encuesta Nacional de Demografía y Salud (ENDS 2015), del Ministerio de Salud y Profamilia, muestra un ligero descenso en el porcentaje de embarazo adolescente, las cifras continúan siendo muy elevada; sobre todo en las zonas rurales (vea gráfico). “Estos embarazos están ligados a menores niveles educativos y socioeconómicos, lo que empeora el problema y los pronósticos de las familias”, añadió la experta.

Si bien las mujeres que más se embarazan en las edades tempranas están en los estratos bajos, es una problemática que también se presenta en los estratos de medianos ingresos; algo que exige una mirada que desborde las condiciones económicas como la primera causa.

Se sabe, según Gómez –quien además es miembro del comité de medicina reproductiva de Fecolsog– que la violencia intrafamiliar es una de las causas más frecuentes. “Pero también tenemos un Estado que no ayuda, los porcentajes de anticoncepción son bajos y se trata de accidentes ocasionados por una educación sexual deficiente o adolescentes con tiempo ocioso que no se cuidan”, añadió la especialista.

Y añade que la mitad de las madres adolescentes no terminan la secundaria y centran su vida en cuidar a un bebé que nunca habrían previsto llegaría en esta época en que era preciso terminar sus estudios y encaminar su futuro.

¿Y los anticonceptivos?

A pesar de que Colombia es líder en América Latina en el consumo de anticonceptivos, con una prevalencia de uso del 75 por ciento, el embarazo adolescente sigue siendo una problemática que afecta a las poblaciones más vulnerables.

“Es falta de información, porque alrededor del 40 por ciento de las adolescentes que toman anticonceptivos orales quedan embarazadas; esto, en razón a que es una población de baja adherencia a la pastilla, se le olvida tomarla y por eso existen mayores posibilidades de embarazo”, considera la ginecóloga Ivonne Díaz.

Además, explica que las adolescentes no saben que los anticonceptivos se pueden conseguir en todos los centros de salud y farmacias del país. Por tanto, su efectividad sigue siendo limitada si no se fomenta la educación sexual desde el hogar y los colegios:

“Y es preciso que se informe sin barreras ni tabúes”, dijo Armando Solano.

“Queremos que las mujeres dejen de usar métodos recomendados por las amigas, o porque lo vio en internet. Hay que tumbar los mitos sobre el tema, porque cada mujer debe revisar con un profesional cuál es el mejor método según su cuerpo y su salud”, interviene la ginecóloga Sandra Gómez.

Una campaña

La Federación Colombiana de Ginecología ofrecerá más de 1.500 citas de asesoría gratuita en anticoncepción en sus consultorios en Bogotá, Cartagena, Cali, Medellín, Cúcuta y Manizales. La estrategia está dirigida a contar historias detrás de la maternidad en jóvenes. De esta manera se busca concientizar sobre lo complejo que resulta ser madre adolescente.

“Queremos que las mujeres, sobre todo las más jóvenes, tengan información profesional en métodos anticonceptivos, para evitar un embarazo no deseado y ejercer autonomía sobre su cuerpo y su vida”, dijo Solano. La cita se puede conseguir en la página www.lashistoriasquenotecuentan.com

¿Qué hacer?

Propicie la confianza y el acercamiento con los hijos, para que juntos busquen asesoría en el tema del inicio de las relaciones sexuales y planificación familiar. -Oriente a sus hijos para que no cedan ante la presión de grupo.

Fuente: Eltiempo.com 

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