El decreto 1782 de 2014, que regula permisos para comercializar medicamentos biotecnológicos, cuyo punto más polémico ha sido la posibilidad de que productos de origen biológico ingresen al país sin necesidad de presentar sus propios estudios clínicos, entró en vigencia este jueves, un año después de la expedición de las guías de inmunogenicidad y estabilidad, tal como se requería para su aplicación.
Los medicamentos biológicos son aquellos que se obtienen a partir de organismos vivos o de sus tejidos y los biotecnológicos están hechos a partir de los medicamentos de origen biológico, pero requieren mayor tecnología y uso de información genética.
La medida, impulsada por el ministro de Salud, Alejandro Gaviria, tiene como objetivo facilitar la entrada de otros competidores al mercado de medicamentos biotecnológicos, costeados por el sistema de salud, con lo cual se podría ahorrar, en los ocho medicamentos más recobrados, entre 300.000 y 600.000 millones de pesos.
Según las cuentas iniciales del Ministro, con cada nuevo competidor que entre al mercado se puede reducir el precio del medicamento biotecnológico entre un 30 y 60 por ciento.
Fuente: El Tiempo