Se trata de una solución creada por el Sena, que se pondrá a prueba en la Clínica Universitaria Universidad Pontificia Bolivariana (UPB) de Medellín para reducir los riesgos de contacto del personal médico y ayudar a los pacientes en el manejo de sus emociones, ofreciéndoles la oportunidad de ver a su familia durante el aislamiento en el hospital.
El contacto con los pacientes positivos es uno de los riesgos más grandes que tienen estos profesionales. La ciencia y la tecnología se encuentran a merced de atacar todos los frentes de acción para combatir y tratar la enfermedad, minimizando los riesgos y aumentando las maniobras exitosas.
En este sentido, investigadores e instructores del Centro de Tecnología de la Manufactura Avanzada del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena) desarrollaron un asistente de observaciones médicas mecánico que puede medir la temperatura del paciente aislado por Covid-19 y facilitarle la comunicación con su familia y el personal de salud.
El Sena iniciará las pruebas en la Clínica Universitaria de la UPB de Medellín para ofrecer soluciones a las necesidades planteadas por el centro médico, el cual se prepara para recibir los primeros pacientes. En el hospital insisten en minimizar los riesgos del personal médico y asistencial, por ello, antes de la llegada de pacientes Covid positivos buscan habilitar este mecanismo tecnológico.
Más de 400 profesionales de la salud están contagiados hoy de Covid-19 en el país.
Según informaron los investigadores del grupo Gacipe, perteneciente al Sistema de Investigación, Innovación y Desarrollo Tecnológico (Sennova), se analiza la posibilidad de que el robot pueda entregarle a los pacientes insumos o medicamentos de administración oral, al igual que la toma de temperatura. Esto sería posible sólo en pacientes contagiados que se encuentran aislados y no en los que están en Cuidados Intensivos.
Entre los datos aportados por el grupo Gacipe destacan las características del robot, que tiene un peso de 23 kilos, 40 cm de ancho, 40 de largo y 1.30 cm de alto, cuenta con sensores para la toma de temperatura y permite una distancia con el paciente de seis centímetros aproximadamente.
La manera de operar será a través de una videollamada en altavoz con el médico tratante y el personal de enfermería. Además de proteger al personal médico, la intención es la de ofrecerle a los pacientes ayuda con el manejo de sus emociones, permitiéndoles tener comunicación con sus familiares.
De esta manera, se reducen los riesgos de depresiones y se aumentan las probabilidades de éxito del tratamiento contra el Covid-19, partiendo de la estabilidad emocional del paciente.