Los CDC de Estados Unidos presentaron evidencia sobre esta versión del covid-19 e insistieron en importancia de la inmunización.
Redacción Gestarsalud.
La variante Delta del Sars-CoV-2, que se identificó por primera vez a finales del año pasado en la India, es actualmente la que genera más inquietud en un mundo que lucha por ponerle fin a la pandemia a través de la vacunación.
La evidencia sobre esta versión del covid-19 está en construcción, al igual que mucho de lo que se sabe sobre el coronavirus. Por ahora, se ha logrado establecer que la Delta, catalogada como de preocupación (VOC) por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), es más contagiosa, tiene manifestaciones clínicas diferentes que la forma original, puede afectar la protección de las vacunas y está presente en 132 países.
De hecho, en Estados Unidos ya es la predominante y de esa nación llegó el primer colombiano identificado con esta variante en suelo nacional, tal como se informó el fin de semana pasado.
Sin embargo, como parte de esa evidencia en construcción, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) dieron a conocer este viernes nuevos hallazgos sobre la Delta que tienen implicaciones especialmente para los no vacunados.
En un documento de esa autoridad revelado por The New York Times, se afirma que si bien la infección por la Delta en personas vacunadas es un evento raro, quienes la adquieren y tienen sus esquemas de inmunización completos podrían transmitirla de la misma manera que los no vacunados.
Esta afirmación con base en un estudio con pocos participantes en el que se evidenció que los vacunados tenían tanta carga viral de la Delta en nariz y garganta como quienes se infectaron y no habían recibido dosis.
Los CDC aseguran, no obstante, que según lo observado las vacunas lograron reducir formas graves de la enfermedad en las personas inmunizadas, por lo que se demostró una vez más el poder de estos fármacos a favor de desenlaces poco letales.
No obstante, también se evidenció que esta variante no solo es mucho más contagiosa (hasta el doble) que las versiones originales, sino que su transmisibilidad se ubica por encima de otros virus como el MERS, el SARS y enfermedades como la varicela (una persona infectada con Delta puede contagiar hasta a ocho más).
La epidemióloga Zulma Cucunubá explica, en ese sentido, que con esta información las medidas de autocuidado como el uso constante del tapabocas, la distancia social y la ventilación de los espacios cobran aún más relevancia y que si bien las vacunas usadas en el mundo pierden un poco de efectividad ante la variante Delta, siguen siento poderosas para evitar hospitalizaciones y muertes.
Un estudio en el Reino Unido, por ejemplo, encontró que la efectividad de las vacunas contra la variante Alpha del virus era de 89 por ciento con las dos dosis, y pasó a 79 por ciento ante la Delta.
“¿En qué cambia la situación con Delta entonces? En que ahora necesitamos más que nunca incentivar la vacunación, en que es posible que en algunos casos se requerirán refuerzos más pronto y en que aún es recomendable seguir usando tapabocas pos-vacunación. ¿En que no cambia? En que al igual que con variantes anteriores la vacunación es vital. No estamos ante una posibilidad biológica real de eliminar los riesgos completamente, pero sí de disminuirlos sustancialmente con vacunas y protección personal”, escribió Cucunubá en su Twitter.
Luis Jorge Hernández, doctor en Salud Pública, le dijo a Gestarsalud que dada la mayor transmisibilidad y la cobertura de vacunas actual, el uso de tapabocas universal es esencial, como señalan los CDC.
“Los datos de la agencia también sugieren que las personas con sistemas inmunológicos débiles deben usar máscaras incluso en lugares que no tienen una alta transmisión del virus. También deberían hacerlo los estadounidenses vacunados que estén en contacto con niños pequeños, adultos mayores o personas vulnerables. En conclusión, las vacunas sí son efectivas contra la variante Delta, pero no evitan la transmisibilidad. No es necesario crear más pánico en la población”, afirmó.
Por su parte, la epidemióloga Silvana Zapata recuerda que la variante Delta apenas se ha confirmado en un solo paciente en Colombia y en el país las predominantes son otras. En ese sentido, no ve cercano un cambio en el perfil de las que circulan actualmente, entre las cuales la variante B1.621 es la de mayor presencia.