Concebido como una enfermedad que ataca a un gran número de personas y animales en un mismo lugar y al mismo tiempo, las epidemias- históricamente- han resultado ser males de salud pública en la mayoría de los países del mundo.
A inicios del siglo XX aún era lenta la propagación de una epidemia, pero la globalización y la migración constante de personas a través de todo el mundo hacen que este tipo de enfermedades se hagan masivas rápidamente. Una vez que la epidemia se extiende a otras naciones o continentes se convierte en pandemia.
Las primeras epidemias en Colombia datan de la época de la conquista. A pesar de los avances científicos y los esfuerzos del Estado por controlar las enfermedades más contagiosas y peligrosas, el país sigue siendo víctima de este tipo de males. La última epidemia se registró en el país hace pocos meses, al menos 24 colombianos murieron por Dengue en 2019. Otras 84.000 personas resultaron contagiadas.
Zica, Dengue, Chikunguña, Chagas, Tuberculosis, Malaria, Lepra, Ébola, Geohelmintiasis, Hepatitis, Sarampión y Enfermedades Infecciosas Desatendidas (ocho de las 13 que existen se han registrado en el país) son algunas de las epidemias para las cuales el Gobierno Nacional, de la mano del Ministerio de Salud y Protección Social, se ha preparado. Algunas de ellas, como Influenza estacional, Tétanos – Difteria, Fiebre Amarilla, Hepatitis A y B y Varicela forman parte del Programa Ampliado de Inmunización colombiano
La grave situación humanitaria que enfrenta Venezuela ha sido una amenaza para la estabilidad de la salud pública nacional. Pero los esfuerzos han sido tales que a finales del año pasado la organización M&RI- conformada por la Cruz Roja de Estados Unidos, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de ese país, la Unicef, la Fundación de las Naciones Unidas y la Organización Mundial de la Salud (OMS)– hicieron la entrega de un reconocimiento internacional a Colombia.
Fuentes: Caracol.com.co; Universidad del Rosario; Ministerio de Salud; La FM;